Tener gastos es parte esencial de las finanzas de cualquier persona y son imposibles de evitar, sin embargo, sí puedes aprender a gastar mejor para no afectar tu economía y comenzar a ahorrar.
Existen diferentes tipos de gastos, de acuerdo con el objetivo que cumplen, por lo que se clasifican en fijos, variables y discrecionales.
A continuación, te explicamos en qué consiste cada uno de estos y cuáles puedes recortar para ahorrar más.
Son todos aquellos que se mantienen invariables cada mes, es decir, el pago de la renta o la hipoteca, el seguro del coche, un crédito automotriz o préstamo personal.
Además, generalmente este tipo de gastos son obligatorios y deben tener prioridad, si estás teniendo dificultades para cubrirlos, lo ideal es que primero hagas recortes en otros gastos.
Tampoco se recortan de forma tan simple, a menos que se hagan cambios drásticos en el estilo de vida, por ejemplo, para pagar menos renta deberás mudarte a otro lugar que tal vez esté más lejos de tu trabajo.
Aquí se engloban todos los gastos que dependen de tu consumo en el mes, por ejemplo, la comida, el pago de algunos servicios como la luz, el gas o el agua, el pago de gasolina o transporte.
Dentro de los gastos variables existen tanto los necesarios, como los innecesarios. Estos últimos los pondremos en una categoría aparte, para que lleves un mejor registro de ellos.
Como los gastos variables dependen de tu consumo, puedes hacer algunos ajustes en caso de que requieras ahorrar en ellos.
Por ejemplo, podrías ir a la oficina algunos días en transporte público, comprar más comida fresca y menos procesada que suele ser más cara o incluso, comer todos los días comida hecha en casa. Todo depende de cuánto necesites ahorrar y por cuánto tiempo.
En estos se engloban todos los gastos prescindibles. Pueden ser fijos, como el pago de suscripciones a servicios de streaming (Netflix, Spotify o Amazon Premium), o variables, como un café por la mañana, la salida con los amigos, compras compulsivas, etc.
Son en los que se va tu dinero sin que te des cuenta, ya que están vinculados a nuestros estados de ánimo, muchos de ellos nos dan placer o satisfacción y por eso a veces sobrepasan nuestra capacidad de pago.
Si necesitas recortar gastos son los primeros que debes eliminar. Además, se recomienda que constantemente los estés revisando porque muchas veces estás pagando por cosas que en realidad no utilizas, por ejemplo, un servicio de streaming que has usado dos veces en el año.
Ante de comenzar a quitar gastos por aquí y por allá, primero debes tener en cuenta algunas cosas:
Por último, recuerda que revisar tus gastos es cuestión de constancia, pero así reaccionarás a tiempo en la eliminación de algún gasto, antes de que se vuelva un problema para tu economía.
Fuentes:
The Balance, Budgeting Discretionary, Variable, and Fixed Expenses.
BBVA, Qué gastos deben aparecer siempre en el presupuesto familiar.
Medium, How I Cut My Monthly Expenses by 32%.