Una forma de garantizar la educación de tus hijos es a través de un seguro educativo. Existen diferentes opciones a las que puedes acceder, pero si te estás preguntando cuál es el que te conviene más, aquí te decimos cómo identificarlo.
Los seguros son una forma de proteger tu patrimonio de imprevistos, por ejemplo, tu coche o tu casa, ya sea de un accidente, desastre natural o robo.
Existen otro tipo de seguros que te protegen ante una enfermedad o en caso de accidente, como los de gastos médicos. Incluso, puedes asegurar tu vida y contratar un seguro para que le sea entregado a tus seres queridos el día que tú faltes.
Sin embargo, a pesar de las muchas ventajas que te dan los seguros, a los que menos se recurren es a los educativos.
En principio, porque hay escuelas públicas en México, cuyos costos son relativamente bajos y que brindan una muy buena educación, como la Universidad Nacional Autónoma de México o el Instituto Politécnico Nacional.
En segundo lugar, porque la educación es algo que las familias dan por hecho, sin considerar que también se trata de una inversión, sobre todo si se piensa acceder a alguna universidad privada, porque la carrera que se desea cursar solo se encuentra disponible en una de ellas.
Tus hijos recibirán el monto que hayas contratado al cumplir 18 años y podrá ser usado para sus gastos educativos. Esto puede ser tanto para el pago de colegiaturas, como otro tipo de materiales, ya sean libros, equipo de cómputo o cualquier cosa que necesiten para seguir avanzando en sus estudios.
El costo del seguro varía dependiendo de tu edad, el monto contratado y el plazo en el que vas a cubrir las primas necesarias.
También depende de la institución con la que contrates el seguro, pero los plazos suelen ir de 4 a 18 años; y puedes elegir la frecuencia del pago, algunas aseguradoras ofrecen pagos mensuales, semestrales o anuales.
Un seguro educativo en México ofrece una serie de beneficios clave para garantizar un futuro próspero. Algunos de los beneficios más destacados son:
En México, existen diversas opciones de seguros educativos para satisfacer las necesidades individuales de las familias:
Existen diferentes ofertas en el mercado, por lo que debes revisar qué es lo que te ofrece el seguro, cuáles son las condiciones y coberturas con las que cuenta.
Por ejemplo, algunos seguros ofrecen cobertura en caso de invalidez o muerte de quien contrata el seguro, para proteger al asegurado menor de edad.
Y como en muchos otros seguros, como el de gastos médicos o de vida, debes responder un cuestionario sobre tu salud y esto podría afectar de alguna manera el monto o el plazo que estás contratando.
También debes verificar la moneda en que harás los pagos, algunos seguros educativos deben pagarse en Unidades de Inversión (UDI) o en dólares, lo que significa que el monto mensual o anual que debes cubrir será variable.
Las aseguradoras que ofrecen este tipo de instrumentos están reguladas por la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
En este enlace, puedes encontrar información sobre la institución financiera con la que vas a contratar el seguro. La Condusef otorga una calificación dependiendo de si tiene reclamaciones, cláusulas abusivas o sanciones pendientes y la actualiza cada seis meses.
Por último, ten en cuenta que si por algún motivo cancelas la póliza no recibirás el monto contratado, sino solo lo que hayas ahorrado hasta el momento.
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Fuentes:
Condusef, Comportamiento General de Aseguradoras.