Controlar las finanzas personales puede parecer un reto, especialmente cuando se trata de gestionar gastos fijos y variables. Estos conceptos son esenciales para estructurar un presupuesto que permita mantener la estabilidad económica y alcanzar metas financieras. Aquí te explicamos cómo identificar estos tipos de gastos, manejarlos eficientemente y ahorrar en ellos.
¿Qué son los gastos fijos y variables?
Los gastos fijos, como su nombre lo indica, son aquellos pagos que permanecen invariables en el mes:
- La renta o la hipoteca
- Créditos
- Seguros
- La cuenta del teléfono o internet
- Televisión por cable
- Servicios de streaming (Netflix, Disney+, Amazon Prime, etc.)
- El plan de telefonía celular
- Membresías (gimnasio, club, etc.)
- La colegiatura de la escuela de los niños
Mientras que los gastos variables son todos aquellos que dependen de nuestro consumo en el mes:
- Servicios (luz, agua, gas, etc.)
- Comida
- Ropa
- Consumo de gasolina o transporte
- Salidas con la familia o amigos
- Compras de otros bienes (películas, libros, videojuegos, juguetes, etc.)
- Consultas médicas
Gastos fijos y variables en tu presupuesto
Al momento de hacer un presupuesto, los más fáciles de manejar son los gastos fijos, porque sabes exactamente cuánto tienes que destinar a ellos en el mes.
Por otro lado, los gastos variables siempre pueden salirse de control y terminar afectando tu presupuesto, al hacer que gastes más o que tengas que recurrir a la tarjeta de crédito para cubrirlos.
¿Cómo manejar gastos fijos y variables sin que afecten tu presupuesto?
- Crea un presupuesto claro y realista.
Asigna cantidades específicas a cada categoría. Para los gastos fijos, utiliza el monto exacto de tus facturas. Para los variables, define un límite basado en tus hábitos y necesidades. - Reduce lo innecesario.
Evalúa cada gasto y elimina los que no son imprescindibles, como suscripciones o membresías poco utilizadas. - Asigna dinero a imprevistos.
Reserva un porcentaje de tu presupuesto para emergencias y evita utilizar la tarjeta de crédito para cubrir gastos inesperados. - Optimiza el consumo de servicios.
Pequeños cambios como apagar luces, reducir el uso de agua y gas, o buscar tarifas más económicas en internet y telefonía pueden generar grandes ahorros. - Realiza un seguimiento mensual.
Revisa cómo se desempeñó tu presupuesto y ajusta las cifras si es necesario. Este ejercicio es clave para evitar desbalances y mejorar tus hábitos de consumo.
Consejos específicos para ahorrar en tus gastos fijos
Adopta hábitos de finanzas saludables como
- Identificación de gastos. Anotar los ingresos y los gastos que tienes al mes, clasificarlos en dos categorías, por ejemplo, los que son indispensables y los que no lo son, para priorizar dependiendo de tus necesidades.
- Compara proveedores. Busca alternativas más económicas para servicios como internet, telefonía o seguros.
- Negocia tus contratos. Consulta con tus proveedores si pueden ofrecerte descuentos o mejores condiciones.
- Evita endeudarte. Mantén un control estricto sobre los gastos fijos para no recurrir a financiamientos innecesarios.
Productos financieros como apoyo
Parte de una buena educación financiera es aprender cómo administrar tu dinero, y parte de esa administración incluye investigar y conocer acerca de los productos financieros del mercado para poderte apoyar de ellos y manejar tu dinero.
Herramientas como cuentas de ahorro, créditos, préstamos, son elementos que no solo generan deuda sino que son auxiliares para equilibrar tus finanzas y poder balancear tus ingresos y gastos en diferentes periodos.
Por ejemplo, un crédito puede auxiliarte en adquirir productos útiles pero de alto valor, como un auto o una casa, que son difíciles comprarlos en un único pago, es aquí donde los créditos hipotecarios o los automovilísticos te auxilian para ir pagando conforme a tu capacidad de pago sin afectar o poner en riesgo tu estabilidad financiera.
Lo importante es llevar un control a través de un presupuesto mes con mes y apegarse lo más posible a él, investigar y comparar productos y así lograr metas de mayor valor monetario para crecer el patrimonio sin dejar de atender los gastos fijos.
Además, herramientas como créditos de nómina pueden ser útiles para equilibrar tus finanzas cuando enfrentas gastos fijos elevados o imprevistos. En Crédito Maestro, ofrecemos opciones personalizadas con tasas competitivas que te ayudarán a mantener tu estabilidad económica sin comprometer tus objetivos financieros.
Consulta con nuestros asesores para encontrar la solución adecuada y logra manejar tus gastos fijos y variables de manera eficiente.
Fuentes:
Bankrate, What’s the difference between fixed and variable expenses?